Y este recuerdo, supuestamente, no solo sirve para honrar a los Seis Millones de judíos exterminados de la forma más inenarrable, o al cerca de Millón de gitanos asesinados, o a los miles de disidentes políticos, homosexuales, y todos aquellos que los nazis consideraban indeseables o enemigos del Estado. No sólo. También, y sobre todo, este recuerdo busca la lucha constante para impedir que algo así se vuelva a repetir. Este recuerdo, esta lucha contra el olvido incesante, es la labor que hemos heredado las generaciones venideras para con las víctimas, para con nosotros y para con nuestros descendientes. Como bien demostró Simon Wiesenthal que en gloria esté -la persona a la que más he admirado en mi vida- alegando constantemente que el tiempo que tenía no era suyo, sino de los que murieron.
Por ello, hace unos días -los que somos judíos y españoles sobre todo- nos levantamos con una noticia aterradora, la cual siempre hemos sospechado cierta, pero a la cual siempre hemos autoimpuesto velos para no creerla:
Movimiento contra la Intolerancia, la única ONG que lucha contra el antisemitismo en España y con la que colabroro asiduamente, difunde una nota de prensa que pego a continuación sobre este informe del Foro para la Contención del Antisemitismo:
Movimiento contra la Intolerancia
NOTA DE PRENSA
Día de la Memoria del Holocausto y los Crímenes contra la Humanidad
MOVIMIENTO CONTRA LA INTOLERANCIA ALERTA DEL AUMENTO DEL ANTISEMITISMO Y PIDE UN MAYOR COMPROMISO DE LAS INSTITUCIONES DEMOCRATICAS FRENTE AL PROBLEMA
El Movimiento contra la Intolerancia hace un llamamiento a las instituciones democráticas para que redoblen sus esfuerzos en la lucha contra el antisemitismo, después de conocerse los datos aportados por El Foro para la Contención del Antisemitismo, que revela que 2009 fue el año en que se produjeron más incidentes antisemitas desde el final de la Segunda Guerra Mundial en Europa Occidental.
Las nuevas y viejas formas de antisemitismo van ganando espacio como demuestra el informe mencionado o el proporcionado hace seis meses por la Liga Antidifamación que afirmaba que el 37 por ciento de los ciudadanos europeos culpa a los judíos de la crisis económica. España y Polonia son los dos países con mayor prejuicio hacia los judíos en los citados informes aunque no haya en nuestro caso sucesos graves de violencia como los detectados en Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos. En España una encuesta entre adolescentes realizada por el Observatorio Escolar de Ministerio de Educación, mostraba que “uno de cada dos adolescentes no compartiría pupitre con otro estudiante judío”.
El día 27 de Enero, proclamado por Naciones Unidas, Día del Holocausto, que conmemora la liberación del campo nazi de exterminio de Auschwitz, debe servir para recordar cuál es la consecuencia real de que el antisemitismo anide en nuestras sociedades, en muchos casos ante una notable indiferencia por parte de la población mayoritaria.
La hora más trágica de Europa que fue el asesinato en masa de 6 millones de judíos, junto con más de medio millón de gitanos, homosexuales, opositores políticos y refugiados españoles del franquismo, es una lección insuficientemente aprendida. El riesgo de destrucción masiva que anida en toda forma de odio y de intolerancia debe ser confrontado con determinación si no queremos que se repita la historia. Si algo ha ocurrido puede volver a ocurrir.
Además, Movimiento contra la Intolerancia advierte que el revisionismo que niega o minimiza el Holocausto cuenta con el apoyo de Estados como Irán cuyo presidente convirtió Teheran en centro de peregrinación de neonazis y revisionistas alentados por la consigna de destruir Israel. En este sentido recordamos la exigencia de modificar el Código Penal según la Directiva Europea de Derecho Penal contra el Racismo que prohíbe y sanciona la Negación del Holocausto
El valor de los testimonios aportados por supervivientes del Holocausto como Violeta Friedman o Primo Levi, entre otros muchos, conforman la señas de identidad europea y su deber moral de erradicar los prejuicios basados en el odio, por lo que el Movimiento contra la Intolerancia pide a instituciones y responsables políticos que estén a la altura de su responsabilidad para evitar que el antisemitismo siga creciendo.
Ciertamente, ha sido una constante de este nuevo siglo en nuestro país, que el antisemitismo sea lo que une a las ideologías extremas. Tanto la extrema derecha como la extrema izquierda y no tan extrema -el Gobierno del PSOE ha llevado a cabo una táctica electoral basada en el saldo de votos que ha arrojado el antisemitismo disfrazado de antisionismo- utilizan la misma retórica y las mismas palabras cuando hablan de Israel -el Estado de Israel ha sido objeto y coartada en esta década de manipulación mediática, tergiversación histórica, y sobre todo de clichés antisemitas cláiscos como viñetas con judíos narigudos o dueños del mundo, amén de ser acusado de genocida y peor, si cabe, que los nazis, deporte favorito en los medios españoles- o de la influencia judía en el mundo. Para más, recordemos que el Tribunal Constitucional dejó de considerar delito la negación del Holocausto, dando alas a actitudes antisemistas impunes que siempre han sido la antesala del daño a los judíos.
Pero, España en general es, como todo ciudadano consciente sabe, un país apático, indolente. Esta noticia no tiene morbo a no ser que emitan el primer plano de un soldado israelí blandiendo un M-16, o el de un niño palestino muerto.
